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El albergue san Romero de América opera desde 2019 atendiendo a migrantes que esperan asilo en EU, pero este año comenzó a recibir a afectados por huracanes en Centroamérica. Hay muchos niños que están siendo acompañados incluso en su proceso escolar…Aquí la historia de su servicio

  

Diana Adriano

En su espera por lograr el sueño americano, más de 30 migrantes provenientes de Cuba, Guatemala, El Salvador y Honduras radican en el albergue San Oscar Romero, como un refugio temporal.

 

Niños migrantes

El padre Carlos Quevedo, misionero claretiano y coordinador del albergue, mencionó que éste funciona desde julio de 2019 para atender a mujeres y niños en situación de calle debido a su estatus legal en la ciudad.

Dijo que él mismo comenzó la obra con apoyo de sus hermanos misioneros claretianos, que en la Diócesis de Ciudad Juárez atienden la parroquia Nuestra Señora de la Esperanza, ubicada en Tierra Nueva.

“Iniciamos en julio 2019 con esfuerzos unidos y en proceso de formar una asociación civil llamada ‘Sembrando hoy y cosechando mañana’”, explicó el sacerdote, quien recibe otros apoyos de bienhechores para solventar los gastos de este proyecto.

El albergue opera en una casa de la Colonia Del Real, cuyo propietario ayuda a la obra de esta forma. Ahí reciben a los migrantes, principalmente mujeres y niños, a quienes se les ayuda a continuar su proceso de enseñanza de nivel primaria y secundaria.

“En la espera del Programa de Protección de Migrantes (MPP), a los niños que tenemos les damos escuela, en sus clases virtuales, para que puedan aprovechar el tiempo y seguir estudiando También hay catequistas que les dan clases para recibir su Bautismo, primera Comunión y Confirmación”, explicó el padre Carl.



Estancia digna

De la misma manera, dijo que a los migrantes adultos se les ofrecen talleres de formación en procesos jurídicos con especialistas, que les ayudarán en su proceso de llegar hacia los Estados Unidos.

“Nosotros en todo momento tratamos de ayudarlos y protegerlos, para que su estancia aquí en nuestra ciudad, sea digna”, comentó.



Cuidados en pandemia

El padre Carlos comentó que debido a la pandemia ocasionada por el coronavirus, han tenido que llevar un protocolo estricto de seguridad para prevenir el contagio entre los migrantes.

“Tenemos que tener mucho cuidado de que no haya algún caso de contagio entre ellos. Contamos con un programa de limpieza, desinfección y llevamos un proceso de seguridad donde les aplicamos gel, desinfectamos sus zapatos, ropa y hacemos que tomen un baño desinfectante”, dijo.

Es algo que tratamos de hacer para prevenir. Gracias a Dios no hemos tenido ningún caso positivo de covid-19”, añadió.



Nuevos migrantes

El misionero claretiano explicó que debido a los huracanes que azotaron países como Nicaragua y Honduras en el pasado mes de noviembre. Cientos de personas iniciaron su camino hacia los Estados Unidos y algunos ya han llegado al albergue San Oscar Romero.

“Migrantes que lo perdieron todo por el huracán, están aquí desde el 1 de enero. Gracias a Dios tenemos el apoyo de varios grupos e instituciones que nos permiten salir adelante.

Ahorita estamos tratando de ampliar las instalaciones para que podamos tener un espacio más digno. Muchas gracias a todos los que han colaborado con nosotros”, finalizó.